Hormigueros
El pueblo del milagro.
Hormigueros es uno de los pueblos más pequeños de Puerto Rico, mide poco más de 11 millas cuadradas. Hay algunas teorías sobre el origen del nombre y algunas personas señalan la topografía montañosa de la zona. Otros creen que proviene de la palabra taína Horomico, que significa río de oro, ya que los españoles buscaban oro en el río cercano.
El pueblo es mejor conocido por ser el lugar de un milagro que ocurrió en el siglo XVI e impulsó la construcción de una basílica que, hasta el día de hoy, es visitada por cientos de personas cada año.
Iglesia de Nuestra Señora de Montserrat y Casa del Peregrino
En la colina más alta del casco urbano de Hormigueros se alza la imponente Basílica Menor de Nuestra Señora de la Monserrate. Durante más de 400 años, este santuario ha estado dedicado a la Virgen de Monserrat, una de las Vírgenes Negras de Europa y patrona de la región de Cataluña en España.
En 1590, Giraldo González, un labrador local (aunque en algunas versiones de la leyenda se le describe como un hacendado catalán), se encontró con un toro salvaje mientras deambulaba por las colinas. El toro se dispuso a embestir contra él y, desesperado, González rezó a la Virgen de Monserrat en busca de ayuda. En ese momento, el toro se arrodilló ante él y bajó la cabeza. González creyó que se había aparecido la Virgen e hizo un gesto para que el toro se detuviera. En honor a este milagro, construyó en el cerro una capilla dedicada a la Virgen de Monserrat.
Un segundo milagro ocurrió cuando la hija de González, de ocho años, desapareció en el campo y reapareció 15 días después, feliz, limpia y con la ropa intacta. Dijo que una mujer la había cuidado y González creía que la Virgen se le había aparecido nuevamente, esta vez salvando a su hija.
A medida que la noticia de estos milagros se extendía por toda la Isla, la gente venía de kilómetros de distancia para visitar la capilla y mostrar su devoción a la Virgen. La pequeña capilla fue nombrada Santuario Nacional en 1720 y en la década de 1770 se inició la construcción de la iglesia. Luego, en 1874, se fundó la iglesia tal como está ahora, con un altar diseñado por el artista puertorriqueño José Campeche. En 1998, el Papa Juan Pablo II concedió a la iglesia el estatus de basílica menor.
Detrás de la basílica se encuentra la Casa del Peregrino que fue construida en el siglo XVII para recibir a los peregrinos que venían de toda la Isla a visitar la ermita. Desde 1975, tanto la iglesia como la Casa del Peregrino han sido incluidas en el Registro Nacional de Lugares Históricos del Departamento del Interior de los Estados Unidos.
Cada 8 de septiembre, el pueblo celebra la Fiesta de la Virgen de Monserrat y vuelven a llegar peregrinos de toda la Isla para mostrar su devoción y celebrar los milagros.
Un paraíso en tu bandeja de entrada
Recibe un boletín mensual con ideas de viaje, noticias, consejos y más.