Hay una razón por la que lo llaman el anfibio más ruidoso.
Has llegado al bosque tropical. Planeas fusionarte con la naturaleza y reconectar contigo mismo. Hay helechos verdes gigantes entrelazados con altos árboles ancestrales que te rodean. Con cada respiración, el aire húmedo, pero puro de las montañas, llena tus pulmones. Se siente frío y fresco. Los pájaros revolotean sobre ti mientras la niebla de las cascadas por las que pasas rocía tu cara. Entonces, mientras desatan todos tus sentidos, lo escuchas: "¡Co-kee! ¡Co-co-kee!"
A medida que pasas el día en el Bosque Nacional El Yunque, el sonido se hace cada vez más fuerte. Pero, ¿Qué es? ¿De dónde viene? Y lo más importante, ¿Qué significa?
Estás escuchando el sonido del coquí, una pequeña rana arborícola nativa de Puerto Rico. Su nombre científico Eleutherodactylus, que significa "dedos libres", hace referencia a la forma de la rana, mientras que su nombre común, coquí, se relaciona directamente con el sonido que hace.
Lo verás en toda la Isla, desde camisetas y pinturas hasta el animal real, pero encontrarás la concentración más significativa de estos anfibios cantores en El Yunque, con 11 de las 13 especies presentes.
¡Es una competencia de canto!
No, no hay una traducción directa para el sonido "co-kee", pero los patrones de comportamiento han establecido que cuando un coquí canta, se anuncia y muestra su territorio para aparearse. Entonces, biólogos forestales como Jessica Isle creen que expresan algo como "aquí estoy" o "hey mujer, aquí estoy". Las hembras coquís generalmente no son conocidas por cantar; el macho hace la llamada de apareamiento, y la hembra escucha para identificar "qué tipo canta mejor".
Hay variaciones en las sílabas, casi como un tartamudeo o canciones incompletas, por lo que es posible que escuches "Co-kee. Co-co-kee. Co-co. Co-kee-kee", y más. Aunque se pueden escuchar coros de coquíes machos cantando desde el atardecer hasta el amanecer, la mayoría de las especies prefieren cantar por la noche. La hembra coquí actúa como jueza en una competencia de canto: busca energía y tono. Mientras canta, el coquí macho dice: "tengo más territorio", "tengo más energía" o "puedo hacerlo mejor". Entonces, los machos se esparcen para minimizar la competencia. Los estudios muestran que la primera parte "co" de una llamada disuade a otros machos, mientras que la parte "kee" atrae a las hembras.
¿Cuánta agua cae en el bosque lluvioso de Puerto Rico?
Coquí todo el día y noche...
¿Recuerdas que hay 13 especies de coquí? Bueno, no todos cantan al mismo tiempo o al unísono. Algunas especies cantan por la mañana, otras por la tarde, pero la mayoría cantan por la noche. Todos tienen su nicho, e incluso si suenan igual para el oído humano, no necesariamente están haciendo el mismo ruido o los mismos patrones.
Algunos coquíes son pacientes y esperan hasta que no haya mucho ruido para cantar. Porque, si vas a cantar, quieres que te escuchen, ¿verdad? Y, el bosque tropical se vuelve ruidoso. Los coros de coquíes se han registrado para alcanzar hasta 96 decibelios. ¡Eso es tan ruidoso como un boom box, una motocicleta o un vehículo todo terreno!
¿Sabías que?
- Puedes encontrar coquíes en lugares húmedos, pero todo lo que necesitan para poner sus huevos es 1/4 taza de agua, que a menudo se encuentra en bromelias o plantas con hojas en formas que pueden acumular agua.
- El coquí come insectos, arañas y lagartijos.
- No pueden morderte, así que no les tengas miedo.
- Respiran a través de su piel, por lo que no se recomienda tocarlos.
- Los coquíes no se mueven muy lejos. En promedio, no viajan más de unos pocos cientos de metros en su vida útil.
Adopta un Coquí
Puerto Rico está lleno de belleza natural y hábitats únicos como manglares, bosques tropicales, arrecifes de coral, salinas, bahías bioluminiscentes y cuevas desde la costa hasta las montañas.
El corazón y el alma del Caribe tiene 36 reservas naturales, siendo El Yunque la más importante. El único bosque tropical lluvioso en el Sistema Nacional de Bosques de Estados Unidos es el hogar del coquí, nuestra querida rana diminuta.
Con tiempo, planearás una futura visita a nuestro bosque para disfrutar en persona de su serenata. Pero, mientras tanto, puedes adoptar virtualmente un coquí y apoyar los programas de sostenibilidad y conservación en la Isla.
Abraza un cuento navideño puertorriqueño
Aprovecha al máximo esta temporada navideña junto a tu familia y conoce la tradición puertorriqueña de los Reyes Magos. El libro infantil "De Boriquén a Belén: un coquí y los Reyes Magos" cuenta la historia de un coquí mágico que viajó con una joven puertorriqueña y los Reyes Magos a la primera Navidad.